Según los expertos, el desayuno es la comida más importante del día, debemos ingerir el 25% del total de las calorías que se consumen en un día.

Desayunar no es tomar únicamente un café o un vaso de leche, necesitamos ingerir algo más porque nuestro cuerpo necesita energía y el cerebro glucosa. Esto nos permite estar más activos y concentrados para afrontar la jornada con energía.

Por lo tanto, un desayuno debe estar representado por tres grupos de alimentos básicos: lácteos (leche, yogur, queso…), cereales (pan, cereales de desayuno, galletas…) y frutas (manzana, pera, naranja, kiwi, zumos naturales…).

Pero para completarlo, faltaría añadir algún alimento que contenga ácidos grasos saludables como los que nos aporta el aceite de oliva.

Desde el momento que nos levantamos, el cuerpo está quemando calorías. Si estamos en movimiento se quemarán más que si no nos movemos. Y, en algunos momentos, el organismo necesita tirar de sus reservas energéticas. Éstas se cubren a través de hidratos o grasas. Por eso, es tan importante desayunar con aceite de oliva, para que formen parte de nuestras reservas.

¿Qué otros beneficios nos aporta desayunar con aceite de oliva?

Salud cardiovascular

El aceite de oliva es rico en ácidos grasos monoinsaturados y ácidos grasos poliinsaturados, grasas saludables que contribuyen a mejorar el colesterol bueno (HDL) y a reducir el colesterol malo (LDL). En general, es un alimento muy saludable para la salud del corazón, y previene el riesgo de enfermedades. Además, el aceite de oliva contiene anticoagulantes que reducen el riesgo de coágulos sanguíneos y de obstrucciones en los vasos.

Sistema digestivo

Ayuda a hacer una mejor digestión y disminuye las secreciones ácidas.

Aumenta la longevidad

Numerosos estudios científicos han constatado que el aceite de oliva previene enfermedades cardiovasculares, por lo que este aumenta la longevidad, ayudándonos a vivir más y mejor.

Mineralización de los huesos

La ingesta moderada de aceite de oliva impide la pérdida de calcio que se produce durante el envejecimiento y que puede llevar a enfermedades como la osteoporosis.

Aliado contra la diabetes

La revista científica Diabetes Care publicó un artículo que revelaba lo siguiente «Cualquier dieta con aceite de oliva puede reducir los casos de diabetes tipo II hasta un 50 %, debido a que el aceite de oliva contiene grasas saludables que pueden regular los niveles de azúcar en sangre y la producción de insulina».

Como ves, desayunar aceite de oliva tiene grandes ventajas. Además de afrontar la jornada con energía y tener reservas energéticas, tiene grandes beneficios para nuestra salud. En Hacienda Ortigosa te recomendamos añadir en tus desayunos o en ayunas una cucharada de aceite de oliva. Ponlo en práctica y coméntanos tus resultados.